La mente suele moverse más rápido de lo que queremos, viajando al pasado y al futuro.
Hoy, exploraremos los viajes hacia el pasado: esos recuerdos que permanecen en nuestra memoria emocional y que a menudo vuelven con una fuerza inesperada. Recordar no es solo un proceso mental, sino una experiencia que también involucra al cuerpo y las emociones.
¿Qué hace que los recuerdos sean tan intensos? Memoria emocional
La memoria emocional almacena aquellos momentos significativos, ya sean positivos o negativos. Cuando evocamos un recuerdo, no solo regresan las imágenes y los detalles, sino también las sensaciones físicas y las emociones vividas en ese instante. Esto explica por qué los recuerdos pueden sentirse tan vívidos, incluso haciéndonos experimentar emociones intensas como si estuvieran ocurriendo de nuevo.
Los recuerdos dolorosos o traumáticos, sin embargo, suelen quedar almacenados de forma menos accesible. En muchos casos, nuestra mente los mantiene "ocultos" para protegernos del malestar. A veces, la vergüenza o el miedo a mostrar vulnerabilidad nos llevan a reprimir estos recuerdos, quedando sin procesar y aislados, aunque no eliminados de nuestra memoria emocional.
Pero los recuerdos con carga emocional negativa y dolorosa pueden no estar accesibles a la memoria consciente, ya que fueron tan dolorosos que nuestro sistema entiende que es mejor no volver a recordarlo, porque nos genera mucho malestar. Entonces parece mejor tirar hacia adelante y así, no se activan los sentimientos y sensaciones asociadas a esos recuerdos negativos.
Además, pensamos que es mejor no compartirlos porque puede provocarnos vergüenza, porque no sabemos compartir nuestra tristeza y dolor o puede ser que sienta desconfianza, ya que muestran mi vulnerabilidad. Por todo esto y más razones se convierten en recuerdos que quedan sin procesar. Quedan apartados y aislados, no se eliminan, sino que la memoria emocional no tiene el mismo tipo de acceso.
Hoy, puede ser buen momento para decidir que hacer con esos recuerdos. Ponte en contacto con nuestro centro InSight psicología para poder ofrecerte nuestra ayuda para poder dar espacio al malestar que producen tus recuerdos.
¿Cómo actuar cuando los recuerdos dolorosos aparecen?
Cuando nos asaltan recuerdos dolorosos, puede ser desafiante mantener el equilibrio entre sentir y racionalizar. Estos recuerdos activan emociones intensas y pueden hacernos revivir la experiencia, lo que conocemos como reexperimentación.
Este fenómeno ocurre porque, al recordar, tu memoria emocional interpreta que esos eventos pasados aún representan una amenaza, provocando una respuesta emocional y física como si el evento estuviera ocurriendo nuevamente.
Pero, ¿Cómo podemos gestionar estos momentos y minimizar su impacto?
1. Reconoce la diferencia entre recordar y reexperimentar
El primer paso para actuar frente a los recuerdos dolorosos es reconocer la diferencia entre recordar y reexperimentar. Recordar es una actividad consciente, en la que evocamos un evento pasado, mientras que reexperimentar implica revivirlo emocionalmente y físicamente. Saber identificar esta diferencia te ayudará a no sentirte atrapado por el recuerdo. Recuerda que lo que sucedió está en el pasado y que ahora estás en un contexto distinto, más seguro.
Un truco útil es verbalizar o pensar afirmaciones que te anclen al presente: "Esto ya pasó", "Ahora estoy en otro lugar y soy una persona distinta", o "Este sentimiento es parte de un recuerdo, no de mi realidad actual".
2. Practica la respiración consciente y la regulación emocional
Una respuesta común a los recuerdos dolorosos es que nuestro cuerpo se tensa y nuestra respiración se acelera, aumentando la sensación de ansiedad. Practicar técnicas de respiración consciente puede ayudarte a activar el sistema nervioso parasimpático, el cual calma el cuerpo y la mente. Una técnica efectiva es la respiración diafragmática, en la que inhalas profundamente por la nariz, expandiendo el abdomen, y exhalas lenta y completamente. Este tipo de respiración reduce la ansiedad y evita que te "atrapes" en el recuerdo doloroso.
Además, integrar estrategias de regulación emocional como etiquetar tus emociones ("Estoy sintiendo tristeza", "Estoy sintiendo miedo") ayuda a distanciarte de ellas. Al nombrar lo que sientes, le das un marco que permite comprender la experiencia de manera más objetiva y sin el impulso de actuar desde la emoción.
3. Cambia el foco de tus pensamientos
Cuando un recuerdo doloroso nos atrapa, es común que se activen pensamientos negativos o catastrofistas asociados a la experiencia original. En estos casos, una estrategia útil es redireccionar los pensamientos. Puedes intentar distraerte con actividades que te ayuden a enfocarte en el presente, como salir a caminar, hacer ejercicio, dibujar o escuchar música relajante.
Si el recuerdo persiste, intenta cambiar el enfoque observándolo desde una perspectiva de crecimiento personal. Pregúntate qué aprendiste de esa experiencia y qué aspectos positivos o resilientes desarrollaste. Esto no minimiza el dolor, pero te permite ver la experiencia desde una perspectiva más constructiva y menos dañina.
4. Utiliza técnicas de anclaje en el presente
Practicar la atención plena o mindfulness puede ayudarte a mantenerte en el presente cuando un recuerdo doloroso emerge. Las técnicas de anclaje te permiten reducir la intensidad de los recuerdos y regresar al aquí y ahora. Algunos ejercicios sencillos incluyen:
Escaneo corporal: lleva la atención a distintas partes de tu cuerpo para identificar dónde sientes tensión y relaja esos puntos.
5-4-3-2-1: observa cinco cosas a tu alrededor, siente cuatro objetos o texturas, escucha tres sonidos, identifica dos olores y un sabor en tu boca. Este ejercicio ayuda a "despertar" tus sentidos en el momento presente.
Estas prácticas interrumpen la cadena de pensamientos y sensaciones asociadas al recuerdo, devolviéndote al momento actual.
5. Habla sobre tus recuerdos con alguien de confianza
Una de las mejores maneras de sanar los recuerdo dolorosos de tu memoria emocional es hablar de ellos con alguien en quien confíes, o idealmente, con un psicólogo en Valladolid o un psicólogo online. Al poner en palabras lo que experimentas, comienzas a procesar el recuerdo de una forma más consciente y menos emocional, lo que te permite observar la experiencia con mayor distancia y neutralidad.
Un profesional puede ayudarte a revisar y reconstruir estos recuerdos, comprendiendo su impacto en el presente, y aprender herramientas para enfrentarlos.
En Psicólogas InSight en Valladolid, estamos capacitados para acompañarte en este proceso, guiándote hacia una mayor comprensión y liberación emocional.
6. No te exijas "olvidar"
Finalmente, es importante recordar que el objetivo no es olvidar. El proceso terapéutico no busca borrar recuerdos, sino integrarlos de manera que puedas vivir con ellos sin que afecten tu bienestar actual. La terapia emocional puede ayudarte a comprender los recuerdos dolorosos como parte de tu historia sin que interfieran en tu vida diaria.
¿Por qué compartir los recuerdos ayuda en la sanación?
Para poder sanar aquellos recuerdos que conllevan una carga emocional dolorosa es ideal poder compartir esas experiencias para que podamos acceder a la memoria emocional .
El proceso de recordar junto a un profesional puede ser especialmente útil. Los profesionales de nuestro centro InSight Psicología , te acompañará en la exploración de estos recuerdos desde un lugar seguro, guiándote para que puedas liberar la carga emocional que aún generan y reconectarte contigo mismo de una manera saludable.
¿Te has sentido identificado?
Si te has sentido identificado con estas experiencias, puede ser el momento de tomar la decisión de sanar esos recuerdos. En InSight psicología, ofrecemos acompañamiento tanto de forma presencial en Valladolid como a través de un psicólogo online. No es necesario que te enfrentes a estos sentimientos en solitario; estamos aquí para ayudarte a gestionar el malestar que producen tus recuerdos y a encontrar una paz emocional.
Para más información sobre nuestros servicios de psicólogos en Valladolid y psicólogo online, o para pedir una primera sesión, no dudes en contactarnos.
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